El día de hoy han salido los más recientes resultados de la famosa evaluación PISA (Program for International Student Assessment); dicha prueba se basa en el análisis del rendimiento académico en dos áreas fundamentales de la formación estudiantil: Comprensión lectora y razonamiento matemático, y para este año, se ha tomado en cuenta un tercer criterio: ciencia y tecnología. Es importante mencionar que dicha prueba es aplicada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE); también es importante mencionar que dicha prueba no se aplica a todos los países del mundo, pero cuyos resultados se consideran los más objetivos, aunque no escapa de críticas razonables.
Como de costumbre, los peruanos, esperanzados, leímos dichos resultados y vemos, en lo personal, sin sorpresas, que nos ubicamos en el último lugar de los 65 países evaluados. Inmediatamente las críticas salieron y los titulares virtuales de los principales medios de comunicación informaban que "estamos peor", "somos el último lugar de América Latina", "estamos en la cola del mundo", etc; sin embargo hay que saber leer las cifras y, es realmente gracioso, leer los gráficos comparándonos con EE. UU., Finlandia, Japón, etc., si leemos los cuadros así, por obvias razones, siempre quedaremos mal; hay que leer los datos estadísticos en forma comparativa con nosotros mismos, es decir, analizar la forma en que estamos evolucionando como país. Si leemos así los datos, podremos comprobar que hemos mejorado, no como deberíamos, no como quisiéramos, pero estamos mejor en comparación a la última prueba PISA del 2009.
Ahora bien, ¿de quién es la culpa?. A eso nos dedicamos los peruanos: siempre buscamos culpables, y más aún en un tema tan importante como la educación. La respuesta más obvia: el Estado; y no dejamos de tener razón al afirmar eso, un Estado reducido, que maltrata a los maestros, que no les garantiza sueldos de calidad, que no les brinda de la capacitación y materiales adecuados, que no proporciona de infraestructura adecuada para el normal desarrollo de las labores académicas.
También debemos mirarnos al espejo, ¿qué hacen los profesores? En los últimos años se ha duplicado el sueldo a los maestros, sin embargo no vemos aún un compromiso activo por la educación. El SUTEP sigue significando una piedra para una adecuada y real transformación de la educación desde los propios maestros. Ojo digo SUTEP, no sindicatos ni gremios. ¿Qué hacen los padres para apoyar el la educación de sus hijos? Los padres y madres son los primeros actores y sin embargo son también los primeros que se desentienden de la educación de sus hijos al creer que para eso está el colegio. ¿Qué hace el mercado?, con la excusa de que el mercado se regula solo, han proliferado una inmensa cantidad de colegios privados de pésima categoría, engañando a padres de familia incautos que creen que "porque es particular es mejor" o "porque es particular aprobarán a mi hijo".
Por otro lado los medios de comunicación embrutecen la mente de padres e hijos al transmitir programas, como "El valor de la verdad", que en su más reciente edición tuvo como invitada a la modelo Tilsa Losano y que contando y exponiendo los secretos de alcoba que deben quedar en las cuatro paredes de una habitación, ha hecho mayor audiencia que otros programas en ese horario. ¿Por qué tanta audiencia? Ley de oferta y demanda en su máxima expresión. Diarios chichas, herederos de la década mafiosa de los 90's ponen en titulares el tema Tilsa y perpetúan un sistema que embrutece a la ciudadanía y también perpetúan un sistema machista que sigue viendo a las mujeres como objetos sexuales y que son tan incapaces de que lo único que les queda es buscar un hombre con plata.
La prueba que más pena me da que hemos reprobado como sociedad es la prueba Tilsa; después no nos quejemos porque nuestros hijos saben qué famoso estuvo con qué jugadora y a las justas recuerdan cuanto es 5x0.
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